Discurso 18 marzo: Día de la Expropiación Petrolera.

Queridos compatriotas,

Hoy conmemoramos el Día de la Expropiación Petrolera, un evento histórico que marcó un hito en la lucha por la independencia económica y la soberanía nacional. Hace 84 años, el presidente Lázaro Cárdenas tomó la decisión valiente y audaz de nacionalizar la industria petrolera y ponerla bajo el control del Estado mexicano.

La expropiación petrolera es un ejemplo de cómo los mexicanos podemos trabajar juntos para defender nuestros intereses nacionales y hacer frente a las amenazas externas. En un momento en que las grandes corporaciones extranjeras controlaban nuestra industria petrolera y se llevaban la mayor parte de las ganancias al extranjero, el presidente Cárdenas decidió que era hora de que México controlara su propio destino.

Esta decisión no fue fácil, pero fue necesaria. La expropiación petrolera representó la unidad y la determinación del pueblo mexicano para luchar por sus derechos y defender su patrimonio nacional. Como dijo el presidente Cárdenas en su discurso al anunciar la expropiación: "El petróleo es propiedad de la nación. Y por lo tanto, debe ser aprovechado en beneficio del pueblo".

 

La expropiación petrolera no solo fue un acto de valentía y determinación, sino que también tuvo un impacto positivo en la economía de México. Al nacionalizar la industria petrolera, México se convirtió en un exportador neto de petróleo y utilizó los ingresos para financiar proyectos de infraestructura y programas sociales. 

Este legado continúa hoy, ya que PEMEX sigue siendo una de las empresas más importantes y valiosas del país.

En este Día de la Expropiación Petrolera, debemos recordar la importancia de la unidad y la determinación para defender nuestros derechos y nuestra soberanía nacional. 

Debemos seguir trabajando juntos para construir un México más fuerte e independiente, en el que el petróleo y otros recursos naturales sean utilizados para el bien común de todos los mexicanos.

Como dijo el líder revolucionario Emiliano Zapata: "La tierra es de quien la trabaja". Y así es con nuestro petróleo. Debemos trabajar juntos para asegurarnos de que beneficie a nuestra nación y a nuestro pueblo. ¡Viva la expropiación petrolera! ¡Viva México!